Bershka impulsa su nueva estrategia de retail como una tipología shop-in-shop. Así, la firma reabre su espacio en el centro comercial Marineda City (A Coruña), con 1.100 metros cuadrados en una sola planta. La tienda integra sus servicios rediseñados de la mano de Ellen van Loon y Giulio Margheri, del estudio de arquitectura Oma.
En contraste con los escaparates totalmente transparentes típicos de los centros comerciales cubiertos, este nuevo punto de venta está diseñado con una fachada de acero inoxidable opaco similar a los grandes almacenes a los que se accede desde la calle. Las grandes aberturas permiten ver la dinámica del interior y los aspectos más destacados de la colección.
El diseño de la tienda de Bershka en Marineda integra los diferentes recorridos de los visitantes en su proceso de compra, tanto online como física. También redefine el espacio comercial en torno a los servicios más que a los productos, situándolos en el centro de la tienda a modo de isla, con una fuerte identidad visual.
El rediseño de la tienda incluye una serie de estructuras que destacan por su forma, color y materialidad. Estas proporcionan a los clientes acceso a servicios específicos adaptados a diversas necesidades de compra. La rapidez es un concepto clave en el diseño de la tienda. Los espacios se han diseñado pensando en distintas “velocidades”, desde lentas e implicadas hasta rápidas y autónomas, lo que permite ajustar el flujo y los niveles de interacción dentro de la tienda.
Destacan varios espacios y servicios dentro del establecimiento como el Fitting Lounge, una de las características más innovadoras de la tienda: probadores colectivos en los que los clientes pueden probarse prendas en grupo (hasta cuatro personas) en un entorno interactivo, enfocado a compartir la experiencia de compra en las redes sociales. Los probadores están equipados con un sistema de reconocimiento de prendas que utiliza tecnología RFID. Así, se pueden solicitar otras tallas o estilos con solo hacer clic en la pantalla táctil. También pueden explorar diferentes inspiraciones para outfits. Los probadores disponen de un sistema de reserva anticipada in situ utilizando el correo electrónico del cliente.
También cuenta con una zona de probadores fastfitting con reconocimiento de prendas mediante sistema RFID, que detecta el número de prendas al entrar o salir, al tiempo que proporciona a los clientes una mayor autonomía para elegir qué comprar; slow checkout, el punto de pago tradicional de la tienda, en el que te atenderá el personal de Bershka, uno de los espacios más distintivos de la tienda, hecho de resina rosa; y una zona de online returns, sistema de devolución de pedidos en línea de forma autónoma.
