El Corte Inglés demolerá su centro comercial ubicado en la calle Retama 8, Méndez Álvaro, para construir dos torres de oficinas de 27 plantas con zonas verdes y tres plantas de garaje. La plantilla de este centro comercial será reasignada a los otros centros comerciales de la compañía.
Según ha adelantado El Confidencial, el grupo empresarial ha conseguido la autorización inicial del Ayuntamiento de Madrid para el derribo del histórico inmueble, que cuenta con 11.811 metros cuadrados y fue inaugurado en 1992; y para la posterior construcción de las oficinas con una superficie edificable de 51.776 metros cuadrados.
Para compensar económicamente la actuación, se incrementa la edificabilidad en 15.206,54 metros cuadrados, puesto que el futuro edificio de oficinas no se levantará sobre toda la parcela, sino sobre una parte, y el resto se destinará a dotaciones públicas y zonas verdes.
La nueva estrategia de El Corte Inglés
El Corte Inglés inició hace años un proceso de reorganización de sus activos inmobiliarios, vendiendo los centros comerciales menos rentables o transformándolos en hoteles. Este es también el motivo tras el derribo del centro comercial de Méndez Álvaro, ya que según el informe técnico-comercial firmado por Deloitte, el edificio es una construcción que responde «a las tendencias del pasado«, reflejadas en una gran superficie comercial de alimentación y con acceso en coche, por lo que «ha perdido parte de su atractivo comercial«.
Preferencias que han cambiado durante la última década, ya que actualmente hay una mayoría de consumidores que prefieren comercios más pequeños, de proximidad y accesibles a pie.
Según recoge el informe de la consultora, «el rendimiento de Méndez Álvaro llevaba una tendencia negativa«: las ventas cayeron un 2 % en 2019 y un 1 % en 2019, mientras que las ventas minoristas del grupo en España aumentaron en esos periodos un 1 % y un 2 % según Eurostat.
