Promenade Lleida ha interpuesto ante los Juzgados de Instrucción de Lleida una querella contra su alcalde, Miquel Pueyo, y contra su primer teniente de alcalde, Antoni Postius. El motivo es la presunta comisión de un delito de prevaricación (art. 404 del Código Penal) con motivo de su actuación en relación con el proyecto de parque comercial y de ocio que promueve Promenade Lleida en la ciudad. La sociedad confirma en un comunicado la información publicada en los medios locales hace unas semanas.
El escrito denuncia que «los querellados han orientado su actuación para, de modo plenamente consciente y deliberado, impedir la ejecución del planeamiento urbanístico que regula el sector SUR 42 de Torre Salses de Lleida y, con ello, parar la implantación del complejo comercial y de ocio que Promenade Lleida promueve en él».
En ejecución del designio político expresado en el programa del actual gobierno municipal de “parar Torre Salses”, los querellados «han incumplido deliberadamente el planeamiento urbanístico de Lleida (norma jurídica de obligado cumplimiento para los particulares, pero también para las Administraciones y sus autoridades) y las obligaciones de gestión urbanística que se derivan de él».
Posibles irregularidades
En otros términos, en lugar de instar la modificación del contenido de un planeamiento con el que están en desacuerdo, que es lo que hubiese procedido en Derecho, los querellados «han incurrido en omisiones, dilaciones e irregularidades -ilegalidades en suma- para no ejecutar el contenido de dicho planeamiento».
Entre las ilegalidades que se imputan a los concejales, figura «el incumplimiento de su obligación de ejecutar el sistema general viario constituido por el desdoblamiento y prolongación del vial Víctor Torres y la prolongación de la calle Francesc Bordalba i Montardit». Dicha obligación viene impuesta tanto por el Plan General de Lleida como por el Plan Parcial del SUR 42, y ambos viales son imprescindibles para el desarrollo del proyecto comercial y terciario de Promenade Lleida, y son básicos también para el impulso residencial de este sector y para la mejora sustancial de la comunicación viaria de los barrios de la margen izquierda de Lleida.
Pues bien, en relación con estos accesos, «los querellados (1) rechazaron la cesión anticipada, voluntaria y gratuita de los terrenos afectados que sus propietarios realizaron, dejando transcurrir el tiempo para luego declarar la caducidad de los expedientes; (2) rechazan incoar nuevamente los expedientes de cesión de tales viales, y (3) rechazan igualmente ejercitar la potestad municipal de ocupación directa de los terrenos. Y ello pese a los requerimientos en tal sentido efectuados tanto por Promenade Lleida como por la Junta de Compensación del sector SUR 42, y pese a que las aportaciones económicas comprometidas por Promenade Lleida determinarán que la ejecución de los referidos viales no va a suponer coste alguno para el Ayuntamiento».
Igualmente, la voluntad de “parar Torre Salses” llevó a los querellados a «obstaculizar deliberadamente la tramitación del procedimiento de aprobación de los instrumentos de gestión urbanística del SUR 42, ampliando plazos, realizando trámites e informes innecesarios y duplicados, etc., con la finalidad de provocar el abandono del proyecto por parte del promotor».
Querella de Promenade Lleida
En definitiva, la querella constituye el último e indeseado medio al que ha tenido que recurrir Promenade Lleida, ya que «cualquier diálogo o acuerdo con el equipo de gobierno local ha sido imposible». La finalidad de esta acción en los tribunales no es otra que «poner coto a las antijurídicas actuaciones del Ayuntamiento de Lleida, guiada por los querellados y dirigidas a impedir grosera y arbitrariamente la ejecución de la ordenación urbanística aplicable en el municipio, para así frustrar un proyecto comercial y de ocio que no es de su agrado».
Por otra parte, Promenade Lleida también ha presentado ante el Tribunal de Cuentas una demanda de responsabilidad contable contra el alcalde Pueyo, el primer teniente de alcalde Antoni Postius y contra la también concejal, Jordina Freixanet.
La acción se basa en que «los tres políticos locales han utilizado ilegalmente fondos del presupuesto local destinados a otros fines para pagar informes jurídicos contra el proyecto de Promenade Lleida. Asimismo, por el hecho de que, al incumplir su obligación de ejecutar la prolongación del vial Víctor Torres, los denunciados están rechazando recaudar la aportación que Promenade Lleida comprometió en el Convenio de Gestión Urbanística firmado el 04/12/2018».
«Promenade Lleida reconoce el derecho de cualquier edil a discrepar de su proyecto, e incluso a hacer todo lo posible para que no se materialice. Ahora bien, tal voluntad debe vehicularse siempre por los cauces que otorga el Derecho, nunca ignorándolo de plano con desviación de poder y lesionando los derechos de los particulares», señalan desde Promenade.
Pese al rechazo del gobierno local, dos encuestas encargadas por los promotores en junio de 2019 y marzo de 2022 a la multinacional GfK, experta en sondeos y estudios de mercado, afirman que cerca del 80 % de las leridanas y los leridanos se muestran a favor de este proyecto. Igual que los barrios colindantes a Torre Salses, que han suscrito convenios de colaboración con la empresa que impulsa el parque comercial y de ocio.
Promenade Lleida lamenta haber tenido que llegar a este extremo, «pero la actuación de los tres políticos locales, continuada a lo largo de los 3 últimos años, no le ha dejado otro remedio que defender sus derechos en los tribunales». Asimismo, «Promenade Lleida desmiente categóricamente que estas acciones de defensa de sus derechos tengan relación alguna con partidos políticos o procesos electorales, como ha afirmado el alcalde de Lleida».
Pese a esta situación, Promenade Lleida sigue trabajando intensamente en un proyecto singular, sostenible, viable y necesario para la ciudad. «Una iniciativa de éxito, con una oferta que no existe ahora en Lleida y que generará riqueza al municipio y su entorno con la creación de centenares de puestos de trabajo, con la complicidad de empresas y proveedores locales y con total predisposición a colaborar con el comercio de proximidad y las entidades sociales y culturales para conseguir hacer de Lleida un centro de atracción de referencia», concluyen.
