Zebra Technologies ha identificado tres acciones para minimizar el impacto de la sobrecarga de la cadena de suministro en las pymes. “La competencia por el escaso inventario de equipos y piezas ha desatado una competencia extremadamente intensa. Las pymes van a sentir que están luchando de forma desigual frente al abastecimiento. Todos los distribuidores se van a sentir presionados por sus clientes, obligados a equilibrar los compromisos a largo plazo con las capacidades actuales de suministro”, subraya Amanda Honig, responsable de Pequeñas y Medianas Empresas de Zebra Technologies.
En otras palabras, cuando los bienes, los servicios o la mano de obra son limitados, debemos «aprender a hacer más con menos». La mejor manera de que los distribuidores más pequeños hagan de su tamaño una ventaja es conocer de primera mano lo que realmente está ocurriendo. Para ello, deben hablar con las personas que están al tanto, las que están en el terreno en cada punto de la cadena de suministro.
Una vez conozcan lo que ocurre dentro y fuera de su organización, pueden empezar a identificar, e incluso anticipar, los eslabones débiles de la cadena de suministro. Por supuesto, cuantas más lagunas o deficiencias se pongan de manifiesto, más razones habrá para resolver el problema. Así, las pymes que se esfuerzan y se comprometen a reforzar sus cadenas de suministro tendrán más facilidad para superar futuras adversidades.
Restar importancia a las desventajas
En lugar de sentirse en desventaja como distribuidor pequeño porque tiene menos recursos tangibles que sus competidores, deberán poner el foco en su agilidad. Además, aunque todavía no cuente con tecnologías de automatización, sí dispone de personas entregadas y trabajadoras que han estado sacando adelante la empresa milagrosamente durante meses, algunos con las herramientas justas.
Sin embargo, el potencial de la digitalización es enorme. El mero hecho de proporcionar a los trabajadores equipos informáticos fiables que puedan alertarles de la llegada de camiones, de la disminución del stock o de un nuevo pedido que debe salir hoy podría cambiar las reglas del juego.
Evaluar los recursos
Es importante aprovechar al máximo las herramientas laborales y tecnológicas que ya tiene a su disposición. Si tiene suficiente personal, pero sólo necesita que se mueva más rápido para aumentar la capacidad de producción, el primer paso es proporcionarles equipos TI de gran capacidad o, en su caso, escáneres de códigos de barras, lectores de identificación por radiofrecuencia (RFID) e impresoras móviles.
Si los trabajadores ya cuentan con herramientas tecnológicas básicas, puede que sea el momento de dar un mayor impulso a su trabajo. El comienzo de la automatización en su centro de distribución es clave para mantener la continuidad operativa, así como una ventaja competitiva a largo plazo cuando la mano de obra sea limitada.
Mejorar la mano de obra para aumentar productividad y rendimiento
Si la pyme consigue datos en tiempo real va a tener más fácil evaluar su funcionamiento en términos de eficiencia y capacidad. Puede medir el rendimiento de forma global y, a continuación, desglosar cada departamento, volumen y trabajador para ver dónde existen oportunidades para solucionar carencias. Este proceso también revelará los puntos fuertes de los trabajadores y asignará a cada uno de ellos el equipo y el turno adecuados. Asimismo, le permite asignar prescriptivamente tareas a determinadas personas en función de su disponibilidad, ubicación y habilidades.
Al final del día, el tamaño no importa tanto como la flexibilidad, la eficiencia y el compromiso. Si la pyme proporciona a su equipo las herramientas adecuadas, les permitirá superar las expectativas de los clientes, incluso cuando las cosas no vayan como debieran. Esto, a su vez, otorga a sus clientes fabricantes una enorme ventaja, ya que dispondrán de los componentes necesarios para ampliar sus operaciones de producción y envasado, y maximizar las oportunidades de crecimiento.