Con la obsesión de poner al cliente en el centro de su negocio y la pasión por la calidad de las materias primas y productos, nace La Hermosita, «espacios de disfrute que recuperan los sabores de hoy para crear los del mañana», según los responsables de la insignia.
Apostar por el futuro preservando la tradición pastelera a través de recetas de toda la vida es la ambición de este grupo de pastelerías-cafeterías que ya cuenta con 11 establecimientos en la capital y Pozuelo de Alarcón desde su creación en 2017 bajo la insignia Juliettas.
La cadena ha anunciado sus planes de expansión. Afirma que a los establecimientos existentes les seguirán próximas aperturas en Comunidad de Madrid y que llegarán, en 2023, a principales capitales del territorio nacional.
La Hermosita toma el nombre del primer establecimiento del grupo ubicado en la calle Hermosilla número 58. Los locales han sido diseñados bajo la premisa de que lo natural es sinónimo de calidad, por eso la iluminación natural en todos ellos es un elemento clave de la decoración, así como los motivos naturales. Espacios actuales, con un diseño acogedor y relajado, para que el cliente pueda disfrutar de productos de calidad sea cual sea el motivo de su visita: una reunión de trabajo, un café con amigos o una quedada familiar.
Según Raúl Armengol, su fundador, “con La Hermosita damos rienda suelta a nuestra pasión de preparar dulces y salados de gran calidad, bocados de felicidad que sumen buenos momentos al día a día de nuestros clientes. La Hermosita es una experiencia sensorial donde se fusionan el sabor y texturas de nuestros productos, el aroma a recién hecho y el ambiente de nuestras tiendas y la sonrisa de nuestros empleados. La Hermosita son sus trabajadores, clientes y proveedores, y por ellos y para ellos nacen estos espacios de disfrute”.
