Este 2020 será un año récord de inversión en el sector supermercados, con un volumen de inversión previsto superior a los 640 millones de euros, según el informe ‘El mercado de la alimentación en España’, presentado por Savills Aguirre Newman esta semana –dentro de su serie de eventos online ‘Savills Talks Now at the Office’–. Este volumen de inversión supera en 460 millones de euros a la inversión de 2019. La gran resistencia del sector de la alimentación ante la crisis ha convertido a este tipo de activo en una buena opción para los inversores privados e institucionales.
Actualmente, las operaciones de inversión en supermercados resultan muy viables debido a que son activos que ponen al servicio del consumidor productos de primera necesidad con una demanda continua en el tiempo; son resilientes a las crisis; es un producto defensivo y líquido, que protege la posición del inversor en el mercado y puede ser transaccionados sin pérdida significativa de valor; disponen de contratos a largo plazo y buenos covenants que garantizan la solidez y viabilidad de la operación, y cuentan con cash-flows seguros que afianzan las carteras del inversor y las diversifican.
En términos generales, el mercado de inversión de superficies de alimentación presenta una gran diversidad de inversores que eligen los activos en función de la ubicación, el tipo de marca y las condiciones contractuales. Al disponer de una mayor capacidad de inversión, los inversores institucionales están más enfocados en portfolios de supermercados que les permite alcanzar el volumen mínimo de inversión exigido por los fondos, mientras que los privados prefieren adquirir activos individuales.
Principales operaciones 2020
Las operaciones más importantes de este año han sido la venta del porfolio Orange de Mercadona a LCN Capital Partners, la compra por parte de Sagax del portfolio GM compuesto por 37 cash & carry y la venta de 6 hipermercados Eroski propiedad de Invesco a Pradera.
Respecto a las yields, el informe subraya que en el mercado de alimentación están muy ligadas al activo y la ubicación. Un supermercado urbano con buenas condiciones contractuales y operador de prestigio podría alcanzar rentabilidades que variarán entre el 5 % y el 6 %. A su vez, se observa una cierta compresión de yields en carteras de alimentación prime en Madrid y Barcelona, y aunque aún no existen referencias, si hay intención de venta, es previsible que se produzca un ajuste en precios.
El informe de Savills Aguirre Newman afirma que en España el stock total de superficies de alimentación (hipermercados, supermercados, tiendas de descuento, cash & carry, tiendas de conveniencia y tiendas especializadas) alcanza los 16,6 millones de metros cuadrados y 23.701 establecimientos, teniendo a una densidad de superficies de alimentación de 353 m² por cada 1.000 habitantes.
Según los datos del estudio, el sector de la distribución está viviendo uno de los mayores procesos de cambio de su historia causado por la COVID-19. Los supermercados e hipermercados urbanos han sido los grandes beneficiados debido a que durante la cuarentena el consumidor ha evitado desplazamientos. A su vez, cabe destacar que el supermercado online ha vivido un gran impulso desde que se iniciara el confinamiento y es previsible que siga ganando terreno paulatinamente, fruto de un nuevo consumidor más digitalizado y de unas plataformas más sólidas y eficientes.
Según datos del estudio ‘Observatorio para la evolución del comercio electrónico de alimentación 2020’, realizado por la Asociación Española de Distribuidores, Autoservicios y Supermercados (ASEDAS), la crisis sanitaria ha provocado un incremento del número de consumidores que comparan precios antes de comprar (+5 %), pero no una disminución de los que no usan el canal online para hacer sus compras, que se mantiene en un 33 %.
Este dato indica que aunque en el futuro la cuota de mercado del canal online continúe ganando terreno, la tienda física seguirá siendo el principal punto de venta y la inversión en la experiencia en tienda seguirá teniendo mucha relevancia.
Experiencia en tienda
Esta experiencia en tienda estará marcada por la demanda del cliente, no solo de producto, sino de un valor añadido; zonas gourmet, clases de cocina, catas de vino, así como mejora en los tiempos de entrega o buen servicio posventa. Ofrecer algo más que compras será primordial para una generación que está dispuesta a invertir más por un producto que le aporte vivencias. Asimismo, el supermercado del futuro contará con las últimas tendencias relativas a la salud con el objetivo de inspirar al cliente. Además de bienestar, el consumidor demandará sostenibilidad, comodidad, etiquetados claros y transparencia.
El estudio sobre el mercado de la alimentación en España elaborado por Savills Aguirre Newman concluye que para 2021 se plantean grandes retos derivados de la posible saturación del mercado y la consiguiente reducción de la productividad por tienda.