Según un artículo publicado este fin de semana por el diario El País, el 29 % de los locales comerciales de la Gran Vía madrileña permanece cerrado tras la crisis del coronavirus.
Los periodistas de El País han realizado un examen por varias calles comerciales españolas y han constatado que la calle comercial más transitada de España y la tercera de Europa tenía cerrados al menos en estas fechas (del 14 al 23 de septiembre) un 29 % de sus negocios.
El lunes 14 de septiembre y el miércoles 23 los dos periodistas recorrieron esta la Gran Vía madrileña, de 1,4 kilómetros, tomando fotografías de ambas aceras. El resultado: de un total de 200 locales, 58 estaban cerrados de forma temporal o permanente. Según el diario, «es la triste imagen de la calle más icónica de Madrid, un barómetro del daño en las empresas céntricas que dependen del turismo. Pero un paseo por casi cualquier rincón de la capital revela estos días el golpe al comercio de calle que está causando la crisis sanitaria, un mazazo más súbito y profundo que el de la crisis financiera de 2008 según comerciantes y expertos. Algunos pronósticos contemplan que la sacudida actual sumada al auge del comercio online supondrán el cierre de decenas de miles de tiendas en toda España hasta 2025″.
El artículo también recoge algunos datos facilitados por expertos del sector inmobiliario. «En tiempos de bonanza tener una tienda en la Gran Vía es el mejor escaparate; en tiempos de crisis puede ser una pesada losa. Primark pagaba antes de la pandemia 500.000 euros al mes de alquiler, H&M, 350.000 euros y Huawei, 160.000 euros. Solo algunos han conseguido que las socimis o inversores propietarios de estos locales les bajen las rentas».
No se sabe aún si estos grandes retailers instalados en la Gran Vía podrán seguir resistiendo o empezarán a cerrar tal y como está pasando en otras capitales como Nueva York. Como suele pasar, lo que sucede allí es visto como una tendencia que heredaremos. “Por desgracia veremos cierres de empresas de reconocido prestigio debido a su alto endeudamiento y la paralización de sus ventas”, pronostica Íñigo Gutiérrez, asesor senior de la consultora inmobiliaria Catella, en declaraciones al citado periódico.
Pero todo dependerá de la duración de esta crisis. En las calles prime de Madrid solo dos locales pequeños han pasado a estar disponibles por efecto de la situación sanitaria, según afirman fuentes de la consultora Savills Aguirre Newman a El País. Esta consultora considera como prime el tramo más codiciado de Gran Vía (de la plaza de Callao a la calle de Fuencarral) y las calles Preciados y Serrano.
“Hay que tener en cuenta que cuesta mucho conseguir una plaza en los ejes prime y una vez conseguida, suelen ser contratos largos, de 15 años de media, plazas seguras que nadie quiere perder tras haber invertido además en ellos con vistas a largo plazo”, dice David Barragán, director nacional de Retail High Street de Savills.
Por la Gran Vía transitaban al día 16.741 personas de media antes de la pandemia, según un estudio de TC Group Solutions, que tiene sensores instalados en 100 calles europeas. Solo Carnaby Street y Brompton Road, en Londres, tenían más tráfico de peatones. El paso de personas en Gran Vía se ha desplomado. En agosto fue un 70 % menor a enero, según la consultora CBRE que recopila datos a partir de la huella digital de los teléfonos.