«Con profundo pesar lamentamos comunicar el inesperado fallecimiento de Isak Andic, nuestro presidente no Ejecutivo y fundador de Mango, en un accidente ocurrido este sábado». De esta forma, la compañía daba a conocer la noticia en un comunicado firmado por el CEO de Mango, Toni Ruiz.
Isak Andic Ermay era fundador y presidente no ejecutivo de Mango. Nacido en 1953 en Estambul, a los catorce años Andic se mudó con su familia a Barcelona. Tras introducirse en el sector de la moda a través de la venta al por mayor y al detalle, en 1984 fundó Mango. Una compañía que cuenta actualmente con más de 15.500 empleados y está presente en más de 120 mercados de los cinco continentes con una red de 2.800 puntos de venta así como una importante actividad online.
«Isak ha sido un ejemplo para todos nosotros. Ha dedicado su vida al proyecto de Mango, dejando una huella imborrable gracias a su visión estratégica, su liderazgo inspirador y su compromiso inquebrantable con unos valores que son los que él mismo ha impregnado a nuestra compañía. Su legado refleja los logros de un proyecto empresarial marcado por el éxito, y también por su calidad humana, su proximidad y el cuidado y cariño que, siempre y en todo momento, ha trasladado a toda la organización», añadía la enseña en el comunicado.
A lo largo de su trayectoria, Andic ocupó cargos como miembro del consejo asesor internacional de la escuela de negocios IESE (IAB), vicepresidente de Banco Sabadell y miembro del International Advisory Board de la Generalitat de Catalunya, del Investment Advisory Council for Turkey y de la Fundación Amigos del Museo del Prado. Además, fue presidente del Instituto de Empresa Familiar, desde 2010 hasta abril de 2012, y patrón de la Fundación MACBA, la Fundación Princesa de Asturias, del Museu Nacional d’Art de Catalunya (MNAC) y de la Fundación Elena Barraquer.
«Su partida deja un vacío enorme pero todos nosotros somos, de algún modo, su legado y el testimonio de sus logros. Nos corresponde, y este es el mejor homenaje que podemos hacer a Isak y que vamos a cumplir, velar para que Mango siga siendo el proyecto que Isak ambicionaba y del que se sentiría orgulloso», concluía el escrito.
