El grupo H&M acaba de lanzar Singular Society, una marca exclusiva para miembros que brinda a quienes se inscriben «acceso a elementos esenciales para la vida sin compromisos, al precio que cuesta hacerlos».
La enseña está construida alrededor de un modelo basado en la suscripción. En ella los productos son ofrecidos «como un servicio para los miembros, en lugar de como una fuente de ingresos». Las cuotas de membresía son las que proporcionan los ingresos a la empresa y esto reduce el problema de la sobreproducción, según H&M.
La oferta inicial de la compañía está compuesta por «una variedad cuidadosamente seleccionada de productos hechos de manera responsable de alta calidad para el hogar y elementos esenciales de vestuario». El grupo H&M planea ampliar el surtido con la incorporación de nuevas categorías para «satisfacer las necesidades y preferencias de los miembros de la marca». No es de extrañar, dado el modelo, que el enfoque sea el «diseño atemporal».
El gigante minorista sueco afirma que está «explorando constantemente nuevas formas de ayudar a la gente a descubrir e inspirarse en la moda y el diseño».
Precio de la membresía
Durante el período de lanzamiento aceptará nuevos miembros «gradualmente, aunque espera aceptar a todos los que quieran registrarse lo antes posible». De momento hay lista de espera. El prcio para los miembros es de 95 coronas suecas (9,50 €) al mes de cuota, que les permite comprar cinco productos al mes. La membresía «Plus» cuesta 195 coronas suecas (19,50 €) y permite a los miembros comprar 25 productos cada mes. Ambas opciones son un poco más económicas si se compran de forma anual.
La marca, que tiene una tienda y un showroom en Estocolmo, parece estar tratando de pensar de manera diferente sobre el enfoque de su negocio de moda y de interior.
En la web de la compañía se puede leer la reflexión que hacen: “Somos un grupo de expertos de la industria, que después de haber pasado la mayor parte de nuestra vida adulta en la moda, el lifestyle y el retail de lujo en algunas de las empresas más grandes del mundo, seguimos volviendo a las mismas preguntas (obvias): ¿Por qué compramos tantas cosas que no necesitamos o ni siquiera queremos? ¿Por qué la calidad es tan cara? ¿Es realmente necesario agregar un margen de beneficio del 600 % (a veces incluso más) para que el negocio funcione? Si es así, ¿por qué tan pocas empresas minoristas obtienen beneficios? ¿Alguien está ganando aquí?».
“Empezamos a pensar. ¿Es posible crear un proyecto en el que todos ganen, que pueda formar al mismo tiempo un negocio saludable y de confianza a largo plazo? ¿Tiene eso el potencial de un impacto positivo a corto y largo plazo sobre ellos mismos, la industria en general y la sostenibilidad?», se cuestionan.
“De lo que nos dimos cuenta es de esto: si cambiamos nuestro modelo de negocio a un concepto basado en suscripción, no seremos dependientes de ganar dinero con lo que vendemos, sino que podremos vivir de las tarifas mensuales. Eso significa que no tenemos que continuar con una producción barata y podemos centrarnos en la calidad y las relaciones a largo plazo con nuestros miembros», concluyen.