El Gobierno de España, a través del ministerio de Industria, Comercio y Turismo dirigido por la ministra Reyes Maroto, presentaba en el día de ayer las nuevas líneas de ayuda que se destinarán a la reactivación del sector comercial. Ámbito de la economía nacional que se ha visto especialmente perjudicado como consecuencia de esta pandemia por coronavirus, y a cuyo estímulo el Ejecutivo, dentro de su Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, destinará a lo largo de los próximos tres años la cantidad de 415 millones de euros. Montante total del que, para este ejercicio de 2021, el Gobierno repartirá 104 millones de euros.
Tal y como se encargaba de explicar la propia Reyes Maroto a lo largo de un encuentro del que participaban representantes de las Comunidades Autónomas y de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), las ayudas se repartirán en función de un total de 3 líneas de actuación, a las que ya está previsto que se sume una cuarta. Habiendo sido todas ellas diseñadas para buscar paliar los distintos efectos negativos a los que ha debido de hacer frente un sector comercial que, subrayan desde el ministerio, se ha mostrado especialmente vulnerable al estar integrado en su mayoría por Pymes y autónomos.
“Los objetivos de las tres líneas se alinean con los marcados por la Unión Europea, enfocándose en la transformación digital del comercio y en su sostenibilidad para conseguir un sector resiliente, competitivo y adaptado a los nuevos hábitos y formas de consumo”, explicaba la propia Maroto a lo largo de unas declaraciones difundidas desde el ministerio de Industria. Un apunte sobre el que la ministra destacaba el papel que dentro de estas las líneas de ayuda jugarán las que se destinarán de manera específica al comercio rural, puesto que “son un elemento que contribuye a asentar población en el medio rural y forman parte de su identidad, además de favorecer el desarrollo económico y la vertebración territorial”.
Cuatro líneas de actuación
Entrando en los detalles concretos de estas diferentes vías con las que se buscará incentivar la reactivación y la modernización del sector comercial nacional, era por su parte Xiana Méndez, secretaria de Estado de Comercio, la responsable de entrar a pormenorizar las características de cada una de ellas.
En primer término, nos encontraríamos así con la línea de ayudas dirigida al apoyo a mercados, zonas urbanas comerciales, comercio no sedentario y otros canales cortos de comercialización, dentro de la cual se situará una partida destinada específicamente a zonas rurales y áreas más despobladas. Una línea a la que se destinarán un total de 200 millones de euros durante los años 2021, 2022 y 2023, con el principal objetivo de proteger y estimular la actividad comercial, mediante la financiación del desarrollo, por parte de las entidades locales, de planes y proyectos tecnológicos, de innovación y de sostenibilidad, así como de mejora de los equipamientos, con claros nexos con los sectores comerciales que se encuentren ubicados dentro de sus respectivos ámbitos de actuación.
En segundo lugar, y enmarcada dentro de esa línea general que veíamos de ayudas al comercio, nos encontramos con esa partida destinada de manera expresa al apoyo, la modernización y el fomento de la actividad comercial, dentro de las zonas rurales. Una línea a la que se la dotará de 15 millones de euros en subvenciones a repartir entre los años de 2021 a 2023. Cantidad que, explican desde el ministerio, deberá destinarse a proyectos e iniciativas que mejoren la competitividad, la sostenibilidad y la diversificación de la economía rural, definiendo este medio como el integrado por un municipio de menos de 5.000 habitantes, o como una “mayoría simple” de municipios que integran una entidad supramunicipal, igualmente de menos de 5.000 habitantes.
En tercer lugar, otros 100 millones de euros, a repartir entre los mismos tres años, serán los que se destinarán a una tercera línea de ayudas, en este caso destinada al fortalecimiento del comercio en zonas turísticas. Un ámbito sobre el que se buscará apoyar a los establecimientos comerciales ubicados en estas áreas concretas de la geografía nacional, dotándolos de fondos con los que mejorar la experiencia de compra de los turistas.
Por último, a estas tres líneas ya vistas, que en su conjunto tendrán la capacidad para repartir hasta un total de 315 millones de euros en ayudas, desde Industria adelantan que está previsto el lanzamiento de otra cuarta línea adicional, en su caso mediante la creación de un Fondo Tecnológico para empresas. Un mecanismo que buscará comentar la modernización y la digitalización del sector, y al que podrán dirigirse de manera directa los comercios, tanto de forma individual como a través de sus asociaciones de comerciantes, presentando sus solicitudes de ayuda. Una línea más así pues de apoyo a la reactivación y modernización de la actividad comercial, a la que en este caso el Ejecutivo destinará una dotación de 100 millones de euros, en esta ocasión a repartir entre los años 2022 y 2023.