Un estudio de CBRE, compañía especializada a nivel internacional en consultoría y servicios inmobiliarios, elaborado a partir de Big Data, ha analizado la evolución de la afluencia en dos de arterias comerciales: la calle Colón de Valencia y el Paseo de la Independencia de Zaragoza.
La afluencia de peatones en calle Colón (Valencia) se intensifica en septiembre hasta superar en casi un 7 % la actividad que se registraba en la misma calle durante el mes de febrero, antes del estallido de la crisis sanitaria. A nivel mensual, según las cifras de la herramienta Calibrate de CBRE, el tráfico peatonal en calle Colón aumentó en septiembre un 89 % respecto a agosto. Se trata del mayor incremento de los niveles de afluencia desde el mes de junio, cuando finalizó la desescalada y se levantaron las restricciones al movimiento de los ciudadanos. En concreto, entre julio y junio la afluencia aumentó un 15 %, para luego caer un 23 % en agosto respecto al mes anterior.
“El incremento de afluencias en el mes de septiembre no impide que Colón haya aumentado su disponibilidad de locales, esto se traducirá en un ajuste de rentas ligeramente a la baja en el corto plazo”, afirma José Ángel Sospedra, director regional de CBRE Valencia.
En cuanto al Paseo de la Independencia (Zaragoza), ha duplicado la afluencia de peatones de agosto a septiembre. Según los datos de CBRE, el Paseo de la Independencia es una de las arterias comerciales españolas más cercanas a recuperar los niveles de afluencia registrados antes de la pandemia, situándose en septiembre solo a un 3 % de las cifras del mes de febrero.
“A fecha de cierre de septiembre, los datos de afluencia reflejada en el Paseo de la Independencia han sido casi un 100 % superior a la de agosto; estas cifras se han mantenido similares en la primera quincena de octubre, aun a la espera de cómo puede afectar el confinamiento perimetral, si bien la primera impresión es que en afluencia en calles como Paseo de la Independencia se va a seguir manteniendo esta tendencia de recuperación positiva”, explica Miguel Ángel Gómez Rando, director regional de CBRE Zaragoza.
De acuerdo con las cifras analizadas a través de la herramienta Calibrate, el flujo de afluencia en el Paseo de la Independencia asciende lo suficiente como para registrar en julio una diferencia del 52 % con respecto al movimiento recogido en febrero y, solo un mes después, en agosto, situarse la afluencia solo a tres puntos porcentuales de los valores obtenidos en febrero, antes del estallido de la crisis sanitaria.
Por otra parte, el tráfico peatonal a lo largo de los meses estivales refleja las fluctuaciones producidas por los rebrotes y sus consecuentes restricciones de movimiento en Zaragoza durante el verano. De este modo, el flujo de afluencia en el Paseo de la Independencia en agosto muestra un descenso del 8 % con respecto al mes de julio. En septiembre el movimiento repunta de forma considerable, con un crecimiento del 101 %, situándose de esta manera muy cerca de alcanzar datos de febrero.
“La recuperación de la afluencia peatonal en el Paseo de la Independenciaha despegado de forma lenta debido a la temporada estival junto al asentamiento del teletrabajo, en muchos casos desde segundas residencias”, recalca Gómez Rando.
Respecto a otras ciudades españolas, los datos de CBRE muestran que, de todo el high street analizado, sólo el eje sevillano de las calles Velázquez, Tetuán y O’Donnell, la calle San Miguel de Palma de Mallorca, la calle Colón de Valencia y la Gran Vía de Bilbao consiguieron recuperar en septiembre las afluencias previas al COVID-19. El resto de las arterias comerciales analizadas en otras ciudades de Madrid, Barcelona, Málaga y Zaragoza se mantuvieron por debajo de los niveles que registraban en febrero.