Cataluña ha aprobado nuevas medidas restrictivas para intentar contener el avance del virus. Desde el 7 de enero y durante diez días, se impide la movilidad entre municipios, así como la apertura de los centros comerciales y otras tiendas no esenciales. Sectores como la restauración y la cultura, muy sacudidos por la crisis económica derivada de la pandemia, se quedan como hasta ahora.
De esta forma, vuelven a cerrar los centros comerciales durante toda la semana y solo podrá abrir el comercio de menos de 400 metros cuadrados (excepto fines de semana, que tan solo podrá abrir al público el comercio considerado esencial, como farmacias o tiendas de alimentación).
En las últimas 24 horas, Cataluña ha notificado 1.319 nuevos contagios y 32 fallecidos. Aunque estos datos son inferiores a los de días anteriores, la evolución y demás indicadores muestran que la pandemia avanza de manera alarmante. Los datos aportados por el departamento de Salud de la Generalitat muestran que ha aumentado la velocidad de transmisión del virus (la Rt) de los 1,11 puntos a 1,27. El riesgo de rebrote sube hasta los 500 puntos, dato que confirma un riesgo muy alto; mientras continúa incrementando la presión hospitalaria, ya en cotas muy elevadas: hay 2.084 personas ingresadas en los hospitales catalanes, de las que 392 permanecen en las UCI.
