Desigual avanza en su objetivo climático a través de la reducción de las emisiones y el desarrollo de una estrategia de eficiencia energética. La marca de moda se compromete a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en un 65 % para el año 2026, respecto a sus índices de 2019. De esta forma, y bajo la filosofía love the world, la compañía continúa con su estrategia de sostenibilidad y con la mirada puesta en llegar a 2050 siendo neutra en carbono.
En cuatro años, la empresa tiene pensado reducir las emisiones absolutas de GEI de alcance 1 y 2. Para las de alcance 2; las generadas por el consumo eléctrico, desde el área de sostenibilidad de la compañía han puesto el foco en incrementar la compra de energía de origen renovable. Así, en 2021, el 84 % de energía consumida en la sede central, centros logísticos y tiendas de España, así como en Francia, Italia, Bélgica, Alemania, Países Bajos y Portugal ha sido renovable.
Este mismo porcentaje de reducción, 65 % y año objetivo, 2026, se aplica en lo que concierne al alcance 3; las emisiones procedentes de la cadena de valor y no directamente controladas por la empresa. Esta apuesta por continuar con las auditorías ambientales y mejorar la trazabilidad y transparencia de las fábricas de Tier 2 gracias a la colaboración con las principales entidades y estándares internacionales.
«La reducción de emisiones es el ejemplo perfecto del trabajo coordinado entre todos los departamentos de Desigual y uno de los objetivos específicos del eje de compromiso climático de nuestro Plan de Sostenibilidad y RSC. Caminamos hacia un modelo de negocio que minimice el impacto medioambiental de nuestra actividad y eso incluye la eficiencia energética, la gestión de residuos o el uso de materiales reciclables, entre muchas otras acciones que tienen que ver con nuestros proveedores y cadena de valor. Se trata, en definitiva, de implicar a toda la compañía y difundir la cultura de la sostenibilidad allí donde estamos presentes», explica Clara Delmuns, product director de Desigual.