El centro comercial L’illa Diagonal pondrá en marcha este verano un proyecto de reforma para mejorar su conectividad con los jardines públicos de Sant Joan de Déu, mediante la construcción de un umbráculo con vegetación que reforzará el entorno verde de la zona y acogerá nuevos espacios de restauración. El diseño de la reforma, desarrollado por la firma de arquitectura y paisajismo Batlleiroig, mejorará la experiencia de los usuarios y adaptará el centro comercial a las nuevas necesidades y tendencias, manteniendo la identidad del proyecto original.
Con esta reforma, L’illa Diagonal quiere seguir siendo el icono en moda, gastronomía y estilo de vida de la ciudad de Barcelona, renovando una parte importante de sus instalaciones y ofreciendo nuevos espacios de encuentro. En esta línea, el centro comercial fomentará la interacción de los usuarios con los jardines públicos de Sant Joan de Déu y recuperará la permeabilidad entre el interior y el exterior del recinto.
Para ello, se construirá un umbráculo con una longitud de casi 200 metros y vegetación. Así, el centro comercial contará con una nueva zona verde polivalente integrada en los jardines, que optimizará la calidad del aire y el confort térmico y acústico. El umbráculo también reordenará y renovará las áreas gastronómicas al aire libre, al incorporar nuevos conceptos de restauración únicos en la ciudad que atraerán a nuevos públicos y operadores.
El conjunto de las obras, cuya finalización está prevista para finales de 2023, coincidiendo con el 30 aniversario de L’illa Diagonal, supone una inversión aproximada de 35 millones de euros.
Importante reforma interior
La propuesta también mejorará el confort de los visitantes del centro comercial con la creación de varias zonas de descanso y la reforma integral de los cuatro núcleos de aseos, lo que supondrá un importante avance en cuanto a sostenibilidad –por un menor consumo de agua–, estética y usabilidad.
Asimismo, se llevará a cabo una mejora general de los elementos arquitectónicos del centro comercial (techos con proyección de imágenes y efectos lumínicos, revestimientos sustituidos por muros vegetales, escaleras rediseñadas, etc.) y se realizarán actuaciones en determinadas tiendas para optimizar su visibilidad.
La eficiencia energética es otro de los aspectos clave del proyecto. En esta línea, la reforma del centro comercial implementará mejoras ambientales encaminadas a reducir el uso de recursos naturales, mediante un menor consumo de energía (iluminación led) y de agua, y la generación de residuos, así como a fomentar el uso de fuentes de energía renovables mediante la instalación de placas solares que supondrán una reducción de emisiones de más de 75.000 Kg anuales de Co2.
L’illa Diagonal también implementará un proyecto de wayfinding para facilitar la ubicación y el recorrido de los visitantes, mediante la combinación de nuevos elementos corpóreos de señalética y pantallas digitales de última generación, al tiempo que introducirá las últimas tendencias en digital signage.
Un proyecto de reforma inspirado en la biofilia
El gerente de L’illa, Gerard Cutal, ha puesto en valor la próxima puesta en marcha de la reforma y ha explicado que el principal objetivo es: «Que L’illa se abra al jardín y el jardín entre en L’illa. Queremos que el primer centro comercial de Barcelona siga siendo un referente en el sector y se adapte a las nuevas demandas de los usuarios, apostando por los espacios verdes, sostenibles y respetuosos con el medioambiente», ha subrayado Cutal.
Enric Batlle, socio fundador de Batlleiroig, ha apuntado que el proyecto de reforma gira en torno al concepto de biofilia: «Se trata de fomentar la conexión entre las personas y la naturaleza. Hemos propuesto estrategias que articulan esta relación, introduciendo luz y vegetación en el interior, abriendo L’illa hacia el exterior y proponiendo el nuevo umbráculo entre el centro comercial y los jardines públicos».
La última reforma de L’illa Diagonal se realizó en el año 2007, coincidiendo con la inauguración de la ampliación del centro comercial. La nueva reforma prevista para este verano, que no implicará afectaciones ni cierres en los locales, se gestó a finales de 2018, cuando L’illa celebró su 25 aniversario. El concurso de arquitectura en el que se impuso la propuesta del premiado estudio Batlleiroig se realizó a mediados de 2019.
La eficiencia energética es otro de los aspectos clave del proyecto. En esta línea, la reforma del centro comercial implementará mejoras ambientales encaminadas a reducir el uso de recursos naturales, mediante un menor consumo de energía (iluminación led) y de agua, y la generación de residuos, así como a fomentar el uso de fuentes de energía renovables mediante la instalación de placas solares que supondrán una reducción de emisiones de más de 75.000 Kg anuales de Co2.
L’illa Diagonal también implementará un proyecto de wayfinding para facilitar la ubicación y el recorrido de los visitantes, mediante la combinación de nuevos elementos corpóreos de señalética y pantallas digitales de última generación, al tiempo que introducirá las últimas tendencias en digital signage.