Mango da un paso más en su camino hacia la sostenibilidad medioambiental y social y adelanta sus objetivos sostenibles tras haber logrado que el 80 % de todas las prendas que comercializa ya incorpore la denominación committed. En un año, la marca ha duplicado el peso de las prendas con características sostenibles en su producción total.
La compañía, ha revisado los hitos marcados a principios de 2020 dentro de su plan estratégico de sostenibilidad y ha apostado por adelantarlos. En concreto, prevé que el 100 % del poliéster utilizado sea reciclado en 2025, duplicando el objetivo inicial previsto para ese mismo año. Del mismo modo, la firma también contempla que en 2025 el 100 % de las fibras celulósicas usadas sea de origen controlado y trazable, lo que supone alcanzar el compromiso cinco años antes de lo previsto. Además, mantiene su meta de que el 100 % del algodón empleado sea de origen sostenible antes de 2025.
«Siendo conscientes del impacto ambiental de nuestro producto, y alineados con los objetivos y compromisos internacionales, trabajamos prenda a prenda, fomentando el uso de fibras de menor impacto ambiental en nuestra colección. El adelanto de los objetivos de fibras sostenibles nos permite seguir avanzando hacia un futuro de la moda más sostenible», explica Toni Ruiz, consejero delegado de Mango.
En 2021 Mango ya alcanzó un 91 % de uso de algodón más sostenible y un 59 % de fibras celulósicas de origen controlado. Además, un 54 % del poliéster utilizado era reciclado, alcanzado el objetivo inicial cuatro años antes de lo marcado.
Se adhiere a ZDHS y Canopy style
En su camino hacia la búsqueda de la sostenibilidad, la compañía apuesta por sellar alianzas con diferentes entidades y empresas de todo el mundo. Entre las principales coaliciones de las que forma parte figuran el International Accord, el Fashion Pact o la United Nations Fashion Charter for Climate.
En 2021, la empresa ha trabajado una nueva estrategia de gestión del agua para reducir y hacer más eficiente el uso de este recurso. En este contexto, se ha unido al programa Roadmap to zero de ZDHC como «colaborador». Esta iniciativa permitirá a la compañía conseguir las mejores prácticas de gestión de químicos en los procesos húmedos a lo largo de la cadena de producción, tanto en el textil como en el calzado, contribuyendo a proteger a los consumidores, los trabajadores y el medio ambiente.
También se ha adherido a la iniciativa Canopy style, por la que se compromete a proteger los bosques asegurando el abastecimiento responsable de todos los materiales de celulosa utilizados en prendas, papel y envases. De esta forma, estos productos contarán con certificaciones internacionales para evitar la tala ilegal y la destrucción de ecosistemas, además de estimular el uso de fuentes de fibra alternativas de menor impacto, como textiles reciclados o residuos agrícolas.