Financiera El Corte Inglés, que aglutina esta actividad y está controlada al 51 % por el grupo Santander, planea extender las posibilidades de uso de esta tarjeta más allá de los grandes almacenes de la cadena y permitir que se emplee en cualquier otro establecimiento para fraccionar el abono de las compras, tal y como avanza Expansión.
En la actualidad, este mecanismo de pago se puede utilizar en los diversos puntos de venta de la compañía, de sus grandes almacenes a las tiendas de Sfera, Bricor, Viajes El Corte Inglés y otros comercios adheridos, principalmente, gasolineras.
Este proyecto, que podría comenzar a desarrollarse tras el verano, se encuentra aún en fase preliminar, tal y como detalla el citado diario.
La tarjeta del grupo El Corte Inglés ofrece diversos servicios a los usuarios: permite aplazar compras hasta 60 días sin intereses, financiar productos y, de forma minoritaria, pone a disposición de los clientes un sistema revolving por el que pueden disponer de una línea de crédito siempre abierta.
Además, y desde 2018, Financiera El Corte Inglés ofrece a los titulares de su tarjeta préstamos para la compra de diversos artículos, sean o no del grupo (excluyendo hipotecas). Se trata una línea de negocio que mueve anualmente 250 millones de euros.